¿Te has preguntado alguna vez cómo puedes mejorar tu bienestar mental y fortalecer tu autoconfianza de una manera profunda y duradera? La respuesta podría estar más cerca de lo que imaginas: en las prácticas somáticas. Estas técnicas, que involucran el cuerpo como una puerta de entrada a la mente y las emociones, están ganando cada vez más reconocimiento por sus beneficios en la salud mental y el desarrollo personal.
Conectando cuerpo y mente
Las prácticas somáticas se basan en la premisa de que el cuerpo y la mente están intrínsecamente conectados. Cuando experimentamos estrés, trauma o ansiedad, nuestro cuerpo también responde, manifestando tensión muscular, respiración superficial y otras sensaciones físicas. Al trabajar directamente con el cuerpo a través de ejercicios de respiración, movimiento consciente y atención plena, podemos abordar no solo los síntomas mentales, sino también las manifestaciones físicas del malestar.
Reducción del estrés y la ansiedad
Uno de los principales beneficios de las prácticas somáticas es su capacidad para reducir el estrés y la ansiedad. Al enfocarse en la sensación presente del cuerpo y la respiración, estas técnicas ayudan a calmar el sistema nervioso, disminuyendo los niveles de cortisol y promoviendo un estado de relajación profunda. Esto no sólo proporciona alivio inmediato, sino que también puede tener efectos a largo plazo en la gestión del estrés.
Reconexión con uno mismo
En un mundo lleno de distracciones y demandas constantes, es fácil perder el contacto con nuestras propias necesidades y deseos. Las prácticas somáticas ofrecen un espacio para reconectar con uno mismo, sintonizando con las sensaciones internas y escuchando la sabiduría del cuerpo. Este proceso de autoconciencia puede fortalecer nuestra confianza en nosotros mismos, ya que aprendemos a confiar en nuestras propias experiencias y percepciones.
Mejora de la autoconfianza
La autoconfianza es un aspecto fundamental del bienestar psicológico y el éxito personal. Al desarrollar una mayor conciencia corporal y aprender a moverse con más facilidad y gracia, podemos experimentar un aumento significativo en nuestra confianza en nosotros mismos. Además, al superar desafíos físicos y emocionales en el contexto de las prácticas somáticas, cultivamos una sensación de logro y empoderamiento que se refleja en todas las áreas de nuestras vidas.
¿TOP DOWN vs BOTTOM UP?
La autoconciencia y la salud mental pueden desarrollarse eficazmente mediante un enfoque «Bottom Up» (de abajo hacia arriba), en contraste con el método tradicional «Top Down» (de arriba hacia abajo). Mientras que el enfoque «Top Down» se centra en modificar los pensamientos y las cogniciones para influir en las emociones y el cuerpo, el enfoque «Bottom Up» parte del cuerpo y las sensaciones físicas para influir en el estado mental y emocional. Las técnicas somáticas, que se enfocan en la percepción y la conciencia corporal, son fundamentales para este tipo de abordaje. Estas técnicas ayudan a los individuos a reconectar con sus sensaciones físicas y a liberar tensiones corporales, lo que a su vez puede transformar estados emocionales y mentales negativos.
El enfoque somático contribuye a la salud mental al permitir que las personas se vuelvan más conscientes de las señales corporales y aprendan a responder a ellas de manera efectiva. Por ejemplo, técnicas como la Conciencia Sensorial y la Respiración Consciente pueden ayudar a los individuos a identificar y liberar tensiones acumuladas, promoviendo un estado de relajación y bienestar. Este proceso de atención plena al cuerpo no solo reduce el estrés y la ansiedad, sino que también puede aliviar síntomas de trastornos mentales al mejorar la regulación emocional y aumentar la resiliencia. Al enfocarse en el cuerpo, las técnicas somáticas proporcionan una ruta directa para calmar el sistema nervioso y restablecer el equilibrio emocional.
Un ejemplo concreto de una técnica «Bottom Up» que incluye prácticas somáticas para la salud mental es el método de la «Liberación Miofascial». Esta técnica implica la aplicación de presión suave y sostenida sobre el tejido conectivo del cuerpo, con el objetivo de liberar restricciones y mejorar la movilidad. Durante una sesión de liberación miofascial de Shin Somatics Bodywork, el practicante guía al individuo a concentrarse en sus sensaciones corporales y a respirar profundamente. Este proceso no solo alivia la tensión física, sino que también puede desencadenar la liberación de emociones reprimidas, promoviendo una catarsis emocional y una mayor autoconciencia. Al liberar tanto las restricciones físicas como emocionales, la liberación miofascial ayuda a restablecer una sensación de equilibrio y bienestar, demostrando cómo el trabajo corporal puede ser un camino efectivo hacia la salud mental.
VIDEL: Alumna del Instituto Flor Espinoza comenta de su experiencia en estudiar en Eastwest y las aplicaciónes en su vida personal y profesional.
¿Te interesa integrar las prácticas somáticas en tu vida?
Las prácticas somáticas son una poderosa herramienta para transformar tu salud mental y aumentar tu autoconfianza. Al honrar la conexión entre cuerpo y mente, puedes cultivar una mayor conciencia de ti mismo, reducir el estrés y descubrir un sentido renovado de empoderamiento. ¡Así que adelante, da el primer paso hacia una vida más plena y consciente con las prácticas somáticas!.
Escrito por Ashley Meeder, BFA, RSMT, RYT E-500
Directora de Eastwest Somatics Institute Sede México